Sectores como el automotriz, aéreo, minero y restaurantero, tendrán que hacer una revisión de sus contratos, e incluso de los esquemas de horas escalonadas, jornadas laborales y ajustes de salario.
A partir del primero de junio, cuando se relajen las medidas de confinamiento según el semáforo en cada estado, las empresas tendrán que analizar los acuerdos que establecieron con los trabajadores y con las organizaciones sindicales.
Carlos Pavón Campos, líder sindical del sector minero, comentó que todas las revisiones de contratos colectivo de trabajo previstas para este año, “se están posponiendo, hemos pedido prórroga para llevar más adelante la revisión, bajo el compromiso que lo que se acuerde sea retroactivo al primero de enero de 2020”.
Sin embargo, considera que será fundamental que haya nuevos acuerdos que se revisen los clausulados de los contratos, entre otras razones, porque son nuevos tiempos en los que se tendrán que modificar prestaciones para que las organizaciones puedan hacer frente a la crisis económica y mantener sus plantillas laborales .
Es posible que “veamos muchos emplazamientos de huelga, como también habrá empresas que se acojan al conflicto de carácter económico y se den por concluidos los contratos, pues es evidente que las empresas no cuentan con los recursos para enfrentar contratos onerosos”, dijo Ricardo Martínez, especialista laboral.
En ese sentido, sectores como el automotriz, aéreo, minero y restaurantero, tendrán que hacer una revisión de sus contratos, e incluso de los esquemas de horas escalonadas, jornadas laborales y ajustes de salario.
Cabe destacar que la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje (JFCA) informó que ampliará su periodo de confinamiento, pues seguirán suspendidas las actividades hasta en tanto autoricen las autoridades correspondientes que no existe peligro de reanudar las actividades de manera presencial.
En su boletín 56 de este 28 de mayo de 2020, la JFCA expuso que “ampliará el periodo de suspensión de las audiencias y diligencias programadas desde el primero de junio de 2020 y hasta que la autoridad sanitaria competente dicte las medidas necesarias para la reanudación de las actividades presenciales. También se suman a esta medida las Juntas Especiales de esa Federal de Conciliación y Arbitraje y Secretaría Auxiliar de Asuntos Colectivos, con excepción del Procedimiento de Huelga”.
Escenarios laborales pos Covid-19
Aún cuando no se tiene certeza en la reanudación de las actividades, se espera que haya una dinámica laboral después del primero de junio; pues “todas las empresas están enfrentando una problemática económica importantísima, en el Artículo 426, de la Ley Federal del Trabajo dice que los sindicatos o los patrones podrán solicitar a las Juntas Federales de Conciliación y Arbitraje la modificación de las condiciones de trabajo contenidas en los contratos colectivos de trabajo cuando existan circunstancias económicas que lo justifiquen”, dijo el especialista laboral.
Lo anterior, es bajo el proceso a través de un Conflicto Colectivo de Naturaleza Económica que ahora es posible anticipar que habrá varios de empresas muy importantes en el país, porque la situación económica ya no justifica esos contratos tan pesados; en consecuencia estos contratos tendrán que adelgazar.
“Es un tema interesante en los próximos meses en temas laborales; podremos advertir si las organizaciones sindicales están acorde con los tiempos y con las nuevas necesidades del mercado laboral”; añadió Martínez Rojas.
En tanto, Pavón Campos sostuvo que, hasta el momento se ha dado una buena relación con la empresa, “incluso, no se han parado las actividades al 100% porque en una mina es muy complicado hacerlo, pero sí tenemos claro que hay grupos de trabajadores que no podrán retornar por que tienen algún padecimiento”, agregó.
Nota publicada en El Economista, sección Empresas por María del Pilar Martínez
